El planchado profesional de ropa puede variar dependiendo de la empresa y del tipo de prenda, pero en general, se siguen los siguientes pasos:
- Preparación: Lo primero es asegurarse de que la plancha esté limpia y en buen estado. Selecciona la temperatura adecuada para la prenda que vas a planchar y asegúrate de que la tabla de planchar esté limpia y nivelada.
- Separación de prendas: Clasifica las prendas por tipo de tela y temperatura, para asegurarte de que no se quemen o estiren.
- Pretratamiento: Si hay manchas o arrugas difíciles de quitar, se puede aplicar un pretratamiento con un producto específico para telas, para ayudar a aflojar la suciedad o las arrugas.
- Planchado: Coloca la prenda sobre la tabla de planchar y comienza a planchar la parte más suave de la tela, utilizando movimientos suaves y uniformes. Asegúrate de planchar todas las áreas, incluyendo los puños, cuellos y bolsillos. Si es necesario, utiliza una almohadilla de planchado para evitar marcas en las telas más delicadas.
- Doblado y almacenamiento: Una vez que la prenda esté planchada, dóblala cuidadosamente y colócala en un perchero o en un lugar donde no se arrugue.
- Revisión y toques finales: Una vez que se ha planchado la prenda, se revisa cuidadosamente para asegurarse de que no haya arrugas o pliegues.
En resumen, el planchado profesional de ropa requiere una serie de pasos y herramientas específicas para lograr un resultado óptimo y sin marcas. Si quieres que tu ropa quede impecable, lo mejor es contratar a una empresa de limpieza profesional con experiencia en este tipo de trabajo.